Si lo dicen todos los expertos, será por algo, ¿no? La dieta saludable es estupenda para nuestro corazón, para cuidar los kilos de más, hasta para nuestro piel. Knowi nos da las claves para seguirla al pie de la letra.
1.- Variedad de productos de la tierra. Hablamos de frutas, verduras, legumbres y hortalizas. Son fundamentales en esta dieta y por suerte, en nuestro país las tenemos de excelente calidad. Nos aportarán fibra, vitaminas, minerales... y además son muy versátiles y podemos realizar estupendos platos con ellas. Cuanto más naturales sean, mejor. Así que ya sabéis llenad la nevera y la despensa que ahora que llega el frío necesitaremos nuestras defensas a pleno rendimiento. Lo más recomendable es comerlas a diario. Ya sabéis 5 piezas de fruta al día (una puede ser un zumo).
2.- Pan y cereales. ¡Será por pan en este país! De todos los tipos, colores y sabores...Perfectos para empezar el día con un poquito de aceite de oliva y ajo, por ejemplo. Y mejor aún si optamos por sus versiones integrales. Nos aportarán fibra mejorando nuestro tránsito intestinal y nos darán hidratos de carbono de fácil asimilación. En cuanto a los cereales, más de lo mismo, avena, trigo, maíz, teff... Estupendos para empezar el día. Las personas con alergias e intolerancias, como los celiacos que no pueden consumir gluten, tienen también una gran cantidad de cereales y pseudocereales sin gluten que son muy importantes en su alimentación para corregir deficiencias que provienen precisamente de no poder ingerir alimentos con gluten.
3.- Uso de aceite de oliva virgen extra acompañando a nuestros platos, por ejemplo las ensaladas y verduras y por supuesto en el desayuno...umm delicioso! El aceite de oliva es uno de los grandes tesoros de nuestro país y tenemos que presumir de ello y beneficiarnos de la calidad con la que llegan al mercado. Pero siempre mejor en crudo, evitaremos un exceso de calorías.El aceite de oliva es bueno para controlar la hipertensión, nos ayuda a retrasar el envejecimiento celular debido a su elevado número de antioxidantes, y también contribuye a que absorbamos mejor minerales como el calcio
4.- Al rico pescado. Los kilómetros de costa que tenemos nos traen a la mesa los mejores ejemplares de pescado, y especialmente son recomendables los pescados azules como el bonito, la sardina, el salmón, el boquerón. Nos aportarán grasas, pero son grasas buenas, necesarias, así que no os cortéis. Cenar pescado es una de las mejores opciones para acabar el día, no os pasaréis en calorías y no le daréis mucho trabajo a vuestro aparato digestivo. Consumir pescado al menos tres veces a la semana es imprescindible para mantener a raya el colesterol, obtener minerales, vitaminas, cuidar el corazón...etc.
2.- Pan y cereales. ¡Será por pan en este país! De todos los tipos, colores y sabores...Perfectos para empezar el día con un poquito de aceite de oliva y ajo, por ejemplo. Y mejor aún si optamos por sus versiones integrales. Nos aportarán fibra mejorando nuestro tránsito intestinal y nos darán hidratos de carbono de fácil asimilación. En cuanto a los cereales, más de lo mismo, avena, trigo, maíz, teff... Estupendos para empezar el día. Las personas con alergias e intolerancias, como los celiacos que no pueden consumir gluten, tienen también una gran cantidad de cereales y pseudocereales sin gluten que son muy importantes en su alimentación para corregir deficiencias que provienen precisamente de no poder ingerir alimentos con gluten.
3.- Uso de aceite de oliva virgen extra acompañando a nuestros platos, por ejemplo las ensaladas y verduras y por supuesto en el desayuno...umm delicioso! El aceite de oliva es uno de los grandes tesoros de nuestro país y tenemos que presumir de ello y beneficiarnos de la calidad con la que llegan al mercado. Pero siempre mejor en crudo, evitaremos un exceso de calorías.El aceite de oliva es bueno para controlar la hipertensión, nos ayuda a retrasar el envejecimiento celular debido a su elevado número de antioxidantes, y también contribuye a que absorbamos mejor minerales como el calcio
4.- Al rico pescado. Los kilómetros de costa que tenemos nos traen a la mesa los mejores ejemplares de pescado, y especialmente son recomendables los pescados azules como el bonito, la sardina, el salmón, el boquerón. Nos aportarán grasas, pero son grasas buenas, necesarias, así que no os cortéis. Cenar pescado es una de las mejores opciones para acabar el día, no os pasaréis en calorías y no le daréis mucho trabajo a vuestro aparato digestivo. Consumir pescado al menos tres veces a la semana es imprescindible para mantener a raya el colesterol, obtener minerales, vitaminas, cuidar el corazón...etc.
5.- Moderación con las carnes. Cierto que algunas como la de pollo o pavo tienen poca grasa, pero es recomendable no excederse en su consumo.Si hablamos de carnes rojas, éstas son más perjudiciales aunque de vez en cuando se pueden consumir, eso sí, mucho mejor eliminar las partes más grasas que no nos aportarán ningún tipo de alimento. La carne nos aportará especialmente proteínas que también obtenemos con otros alimentos como el huevo, cuyo consumo no debe superar las 3 unidades semanales para que no se nos dispare el colesterol.
6.- Frutos secos al menos 3 veces por semana. El otoño es además la estación perfecta para consumirlo, aunque en realidad se conservan tan bien que podemos consumirlos todo el año. Son estupendos por su aporte de minerales y vitaminas y como un picoteo que nos aportará energía sin recibir demasiadas calorías, aunque cuidado con los más calóricos como es el caso de los pistachos. Son muy buenos también para la memoria, así que se pueden convertir en un alimento perfecto para que los pequeños lo lleven al cole y lo disfruten en el recreo.
7.-Lácteos a diario. La joya de la corona en este caso son los yogures. Recientemente se ha demostrado que su consumo habitual reduce de forma considerable el riesgo de desarrollar enfermedades como la obesidad. Así que mejor tener la nevera bien surtida. La leche y los quesos también son muy importantes, nos aportan minerales como el calcio y también proteínas, pero mejor tomarlas en sus versiones light. En el caso de personas con intolerancia a la lactosa, existen ya en el mercado una gran cantidad de productos lácteos sin lactosa, leches, yogures, quesos e incluso nata para cocinar.
Fuente: Que.es
6.- Frutos secos al menos 3 veces por semana. El otoño es además la estación perfecta para consumirlo, aunque en realidad se conservan tan bien que podemos consumirlos todo el año. Son estupendos por su aporte de minerales y vitaminas y como un picoteo que nos aportará energía sin recibir demasiadas calorías, aunque cuidado con los más calóricos como es el caso de los pistachos. Son muy buenos también para la memoria, así que se pueden convertir en un alimento perfecto para que los pequeños lo lleven al cole y lo disfruten en el recreo.
7.-Lácteos a diario. La joya de la corona en este caso son los yogures. Recientemente se ha demostrado que su consumo habitual reduce de forma considerable el riesgo de desarrollar enfermedades como la obesidad. Así que mejor tener la nevera bien surtida. La leche y los quesos también son muy importantes, nos aportan minerales como el calcio y también proteínas, pero mejor tomarlas en sus versiones light. En el caso de personas con intolerancia a la lactosa, existen ya en el mercado una gran cantidad de productos lácteos sin lactosa, leches, yogures, quesos e incluso nata para cocinar.
Fuente: Que.es