Las papas moradas o púrpuras podrían ser una de las armas naturales más poderosas para luchar contra el cáncer de colon, según un estudio.
El estudio publicado en el Journal of Nutritional Biochemistry refiere que ratones con cáncer de colon que fueron alimentados con pulpa de papas moradas al horno registraron un incremento en la destrucción o muerte de las células cancerígenas (apoptosis) y mostraron una menor proliferación de células madre cancerosas.
La verdura conservó sus propiedades anticancerígenas, incluso después de la cocción. El tamaño de la porción usada, si se tratara de un ser humano, sería casi lo mismo que comer una papa de tamaño mediano en el almuerzo y la cena, o una grande al día.
Atacar las células madre sería una manera efectiva para contrarrestar el cáncer, afirmó el Dr. Jairam K.P. Vanamala, autor principal del trabajo, en una información difundida por la institución académica.
La verdura conservó sus propiedades anticancerígenas, incluso después de la cocción. El tamaño de la porción usada, si se tratara de un ser humano, sería casi lo mismo que comer una papa de tamaño mediano en el almuerzo y la cena, o una grande al día.
Atacar las células madre sería una manera efectiva para contrarrestar el cáncer, afirmó el Dr. Jairam K.P. Vanamala, autor principal del trabajo, en una información difundida por la institución académica.
El académico comparó las células madre del cáncer con la mala hierba: “Se puede cortar la maleza, pero las raíces están todavía allí y la mala hierba seguirá creciendo; del mismo modo, si las células madre del cáncer aún están presentes, el cáncer todavía puede crecer y propagarse”.
Según los investigadores, serían varias las sustancias en las papas moradas que trabajan simultáneamente en múltiples vías para ayudar a matar a las células madre del cáncer de colon, incluidas las antocianinas, el ácido clorogénico y el almidón resistente.
Nuestro trabajo sugiere que las papas moradas contienen almidón resistente que sirve de alimento para las bacterias del intestino, que a su vez producirían ácido butírico.
“El ácido butírico regula la función inmune en el intestino, suprime la inflamación crónica y también puede ayudar a las células cancerosas a autodestruirse”, refirió el Dr. Vanamala.
El siguiente paso de los investigadores será probar el efecto de las papas moradas en seres humanos con cáncer de color.
También planean probarlas en otras formas de cáncer. Los autores del trabajo consideran que las papas podrían usarse para la prevención primaria dirigida a detener el desarrollo de cáncer y para la prevención secundaria, es decir, ayudar a los pacientes en remisión a permanecer libres de cáncer.
Vanamala afirmó que los alimentos podrían ofrecer una forma más saludable para prevenir el cáncer, ya que tienen efectos secundarios limitados en comparación con los tratamientos farmacológicos. “De hecho, hemos visto que los animales que consumían papas moradas son más saludables en comparación con los animales que recibieron el tratamiento de drogas”, añadió.
Según los investigadores, serían varias las sustancias en las papas moradas que trabajan simultáneamente en múltiples vías para ayudar a matar a las células madre del cáncer de colon, incluidas las antocianinas, el ácido clorogénico y el almidón resistente.
Nuestro trabajo sugiere que las papas moradas contienen almidón resistente que sirve de alimento para las bacterias del intestino, que a su vez producirían ácido butírico.
“El ácido butírico regula la función inmune en el intestino, suprime la inflamación crónica y también puede ayudar a las células cancerosas a autodestruirse”, refirió el Dr. Vanamala.
El siguiente paso de los investigadores será probar el efecto de las papas moradas en seres humanos con cáncer de color.
También planean probarlas en otras formas de cáncer. Los autores del trabajo consideran que las papas podrían usarse para la prevención primaria dirigida a detener el desarrollo de cáncer y para la prevención secundaria, es decir, ayudar a los pacientes en remisión a permanecer libres de cáncer.
Vanamala afirmó que los alimentos podrían ofrecer una forma más saludable para prevenir el cáncer, ya que tienen efectos secundarios limitados en comparación con los tratamientos farmacológicos. “De hecho, hemos visto que los animales que consumían papas moradas son más saludables en comparación con los animales que recibieron el tratamiento de drogas”, añadió.