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Propóleo: las bondades de la medicina natural


  • El propóleo es un elixir natural con propiedades antiinflamatorias, antibacterianas, antimicóticas y antibióticas, entre otros beneficios.

En la actualidad existen numerosos productos apícolas que se presentan como magníficos suplementos nutricionales. Sin embargo el uso de los productos de la colmena en la alimentación del ser humano y como medicamento se remonta a varios siglos atrás en nuestra historia. Hoy el propóleo se ha convertido en un gran aliado para quienes buscan una alternativa natural y saludable a la hora de elegir un antiinflamatorio, antimicrobiano, antibacteriano y/o agente antimicótico.

¿Qué es el propóleo?

El propóleo es elaborado por las abejas a partir de una sustancia resinosa de origen vegetal. Las abejas la utilizan para desinfectar la colmena, sellar grietas y embalsamar intrusos que no pueden expulsar debido a sus dimensiones.

Composición del propóleo

La composición del propóleo varía según la flora y el clima de cada zona geográfica. Hasta la fecha se han identificado más de 250 elementos constitutivos y cerca de 50 principios biológicamente activos. Cuenta con aceites esenciales, minerales, aminoácidos, bálsamos, resinas y más de 50 grupos de flavonoides.

Propiedades del propóleo

El propóleo cuenta con más de 20 propiedades y es beneficioso para las vías respiratorias, para el aparato digestivo, para el aparato circulatorio, para la piel y para la salud bucal. Además no tiene contraindicaciones, ya que no se han registrado reacciones alérgicas ni toxicidad por sobredosis. Es además totalmente compatible con otras prácticas terapéuticas.

Basta repasar algunas de las propiedades del propóleo para comprender la cantidad de beneficios que reporta: como dijimos, es antimicótico, antibacteriano, antioxidante, antialérgico, antiviral, anestésico, citostático, antituberculoso, analgésico, desodorante y termoestabilizador, entre otras de sus bondades. Es un excelente biorregulador y ayuda a mejorar estados anémicos, prevenir la arteriosclerosis y mejorar la capacidad inumonológica de nuestro organismo.

Sobre el uso del propóleo

El propóleo tiene incontables aplicaciones, ya que es utilizado para tratar resfriados comunes, gripe, sinusitis, otitis, bronquitis, neumonía crónica, asma bronquial, laringitis y otros malestares. Además el propóleo tiene numerosos usos en el área de la dermatología, ya que se lo utiliza para el tratamiento de abscesos, forúnculos, verrugas, aftas y grietas.

Presentaciones y productos derivados del propóleo

- Pastillas o caramelos de propóleo: se utilizan para aliviar la tos, afonía, irritación de la garganta, inflamaciones y anginas, entre otros malestares.
- Solución de propóleo: su consumo en gotas es utilizado como suplemento dietario de uso regular, ayudando a reforzar el sistema inmunológico y operar como biorregulador. Se recomienda realizar buches con propóleo antes de ingerirlo, con el objetivo de desinfectar la cavidad bucal, reforzar el esmalte dental, prevenir caries, desinflamar encías y combatir la placa bateriana. Su presentación en gotas también puede ser usada para el tratamiento de hongos. Actualmente también es muy frecuente su venta en spray.
- Ungüento de propóleo: es posible encontrar en ciertas farmacias el ungüento de propóleo, muy aconsejable para tratar problemas dermatológicos, como heridas, eccemas, verrugas, hongos, herpes, llagas, acné, dermatosis, urticarias y otras problemáticas.
- Miel con propóleo: permite reducir el impacto que tiene la contaminación atmosférica en nuestro organismo, protegiendo las vías respiratoras. Los especialistas lo recomiendan como complemento alimentario para asmáticos y es un gran aliado para quienes sufren de anemia.

El propóleo tiene incontables aplicaciones, ya que es utilizado para tratar resfriados comunes, gripe, sinusitis, otitis, bronquitis, neumonía crónica, asma bronquial, laringitis y otros malestares. Además el propóleo tiene numerosos usos en el área de la dermatología, ya que se lo utiliza para el tratamiento de abscesos, forúnculos, verrugas, aftas y grietas.